Una recomendación común para secar un móvil mojado es sumergirlo en arroz. Sin embargo, los expertos advierten que esta práctica podría generar resultados no deseados.
Imaginá que estás en una fiesta, que vos y tus amigos están jugando juegos de mesa y alguien accidentalmente derrama una bebida y, sin querer, tu celular queda empapado. Con el pánico en aumento, lo más seguro es que vas a recordar ese consejo popular: “meter el celular en arroz”. Antes de seguir con esa idea, es importante que conozcás por qué esta solución puede no ser la mejor y qué deberías hacer en su lugar.
En este Claro Blog te damos algunos consejos de expertos para garantizar que tu celular va a seguir funcionando con normalidad después de una mojada accidental.
Lo que pasa con el arroz
Apple especifica que no es recomendable colocar el iPhone y ningún otro dispositivo móvil en arroz para solucionar un problema de humedad. En lugar de eso, sugiere adoptar otras medidas para proteger tu dispositivo, las que comparte en su sitio web de soporte.
Las pequeñas partículas del arroz o el polvillo, pueden ingresar en el teléfono celular y afectar su funcionamiento. Aunque el riesgo no siempre se materializa, es mejor evitarlo. Además, es importante no usar fuentes de calor externas para secar el móvil, como un secador de cabello, pues el calor excesivo es uno de los mayores enemigos de los teléfonos móviles. Tampoco debés insertar objetos como algodón o toallas de papel en el puerto de carga.
Otros errores comunes
Cuando un smartphone se moja, nuestra reacción instintiva suele ser soplarlo para que se seque. Sin embargo, esto puede agravar aún más el problema; ya que al soplar podríamos empujar la humedad de un área a otra del equipo, afectando más componentes internos.
Lo mismo ocurre si agitás el teléfono como si fuera un abanico. Este movimiento puede hacer que el líquido se desplace por los diferentes componentes internos, complicando el problema y aumentando el riesgo de daños graves.
Además, al soplar o agitar el dispositivo, podrías introducir pequeñas partículas de polvo y pelusa en su interior. Estos residuos pueden acumularse en el interior y causar problemas a largo plazo, incluso después de que el agua se haya evaporado.
Y entonces ¿qué hacemos?
Si tu celular se moja tenés que secar el exterior del dispositivo utilizando una toalla o un paño limpio y absorbente. Pocedé a apagarlo para evitar posibles daños adicionales.
Otra acción importante es extraer la tarjeta SIM y si el modelo del celular te lo permite, retirá la carcasa trasera y la batería para secarlas por separado. Y ya que muchos de los dispositivos no están diseñados para ser desmontados, los fabricantes sugieren darle golpecitos suaves con el puerto de conexión hacia abajo para ayudar a que el líquido salga del dispositivo.
Hay que dejar el celular secando por 30 minutos antes de intentar cargarlo y encenderlo nuevamente. Si no aparece la alerta de detección de líquido, el dispositivo debería estar seco, pero si la advertencia aparece, desconecta el móvil, apágalo y colocalo en un lugar seco y ventilado durante 24 horas.
Si después de seguir estos pasos, tu celular aún presenta problemas, llevalo al servicio técnico para una evaluación. Recordá que, aunque tu dispositivo tenga certificación IP68 de resistencia al agua, lo ideal es evitar que el puerto de carga se moje en exceso.