El riesgo de desaparecer, debido al cambio climático, está motivando a este país a trasladarse al metaverso.
Tuvalu está poniendo en marcha un ambicioso proyecto con el que pretende convertirse en la primera nación digital del mundo y trasladar a todo el país a vivir en la nube. Lejos de ser un capricho, esta idea es una verdadera necesidad para lograr subsistir en el tiempo; ya que el cambio climático está amenazando con desaparecer a este pequeño territorio, y su gobierno está buscando soluciones para que las futuras generaciones no pierdan sus raíces y su identidad.
Por si no lo ubicás bien, Tuvalu es una pequeña isla de poco más de 12 mil habitantes, ubicada en el océano Pacífico, entre Australia y Hawaii. El problema es que el cambio climático está aumentando el nivel del mar y más del 40% de la isla ya se hundió; pero una noticia aún peor es que antes de que termine el siglo la isla estará sumergida completamente; obligando a sus habitantes a migrar a países cercanos.
Con esto, su cultura, población, historia y naturaleza también van a desaparecer, por lo que quieren preservar la identidad de su país en el metaverso. En este Claro Blog te explicamos cómo lo van a hacer.
Con el agua hasta la rodilla
Durante la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático, realizada en 2021, el Ministro de Relaciones Exteriores de Tuvalu pronunció un duro mensaje desde un punto de la isla que ahora se encuentra inundado. Pidió mayor compromiso para aminorar los efectos del calentamiento global y también anunció el plan de convertirse en el primer país del mundo que existirá solamente en el metaverso.
Según dijo, la tierra y la cultura son lo más preciado para su gente y para mantenerlos a salvo, sin importar lo que suceda en el mundo físico, estarán resguardados en la nube, para que sus ciudadanos puedan seguir visitándolo; aunque sea de forma digital.
Preservarlo para las futuras generaciones
Al seguir existiendo en el mundo digital, su cultura, idioma, costumbres, gastronomía e historia podrían conservarse, y así las futuras generaciones podrían recordar y conocer cómo se vio alguna vez su hogar.
El proyecto contempla una reproducción digital de todo el territorio, que incluya su flora y fauna, así como sus ciudades y también todo el patrimonio inmaterial de la isla, sus prácticas artísticas, tradición e incluso algunas prácticas innovadoras como sus sistemas de sembrado. Todo será almacenado en una base de datos que estará disponible para las futuras generaciones.
Seguir funcionando como Estado
Pero más allá de un orgullo de nación y de conservación de su identidad, el hecho de seguir existiendo de forma digital le va a permitir a Tuvalu seguir existiendo como como país con reconocimiento internacional. Esto garantizará seguir realizando trámites gubernamentales y acceso a otros servicios estatales como una nacionalidad, acceso a la justicia, entre otros.
Según su ministro, las generaciones más jóvenes que han tenido que migrar tienen dificultades para adaptar su herencia nativa con los estilos de vida de los países en los que viven y con el acceso a su país en el mundo digital también podrán mantener su participación en el sistema político nacional; es decir seguir formando parte de su país.
